Ya conocemos lo que es la diversidad sexual y la conexión entre sexualidad y autoestima. Ahora toca conocer nuestro mapa erótico.
¿Cómo lo puedes hacer?
Explora tu cuerpo y tus sensaciones, y qué te despierta el deseo.
Conoce tus zonas erógenas (qué partes de tu cuerpo te gusta que te toquen, besen, chupen, acaricien, laman, etc)
Y cómo te gusta que te lo hagan (velocidad, presión, en qué momento…)
¿Qué conseguirás con esto?
Conocer tu cuerpo, te permitirá compartirlo y disfrutar con él.
Establecer relaciones sanas desde la empatía.
Disfrutar del sexo en todo su potencial.
Recuerda que:
En tu mapa erótico también entran tus fantasías sexuales.
Cada persona tiene su mapa erótico y va cambiando a lo largo de la vida.
El mayor órgano sexual es la piel y el más importante, el cerebro.
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